Comenzamos un año caliente, y nunca mejor dicho, en el que
el adelanto de las clases en los centros de enseñanzas medias del País Valenciano y las deficiencias en las infraestructuras de las aulas, provocaron que les
temperaturas a les que se llegaron en las primeras semanas de clase
superaran el máximo permitido por la normativa laboral.
No podemos negar la gran sorpresa y orgullo que nos produjo ver como los estudiantes se organizaban entre ellos y con el profesorado, y comenzaran a convocar manifestaciones, concentraciones y huelgas. De ese
movimiento, surgieron varias asambleas en los institutos de nuestro territorio que todavía continúan y sirven como estructura de lucha en sus centros.
La situación en les universidades del País Valenciano es diferente. El Plan Bolonia ha traído clases de asistencia obligatoria, más exámenes
parciales, más prácticas y memorias que entregar, más trabajos y seminarios,
tutorías obligatorias… Todo esto dificulta que el estudiantado, sobre todo aquellos con menos recursos y con mayor presión para aprobar las asignaturas, se organice
y dedique tiempo a reivindicar sus derechos. Además, las promociones que han vivido la subida de tasas y el impacto de Bolonia están acabando sus estudios, o los
han acabado ya, y el resto de estudiantes han entrado directamente en estas
condiciones, por lo que no les ha marcado tanto.
Para darle continuidad al movimiento surgido en enseñanzas medias y para reavivar el movimiento en la Universidad, hemos de lograr pequeñas victorias en el País Valenciano, como el B1 gratuito, el fraccionamiento del pago de
las tasas universitarias, quitar barracones de los institutos, impedir la cesión de
terreno público a entidades privadas o conseguir transporte hacia centros de estudio gratuito. Victorias fruto de la presión en la calle y la negociación en las
instituciones de los centros de estudio o la administración. Para hacer esta presión, necesitamos al estudiantado de nuestra parte, luchado con nosotros, y demostrando la fuerza que tenemos.
Por todo ello, desde el FEPV y sus sindicatos miembros, llamamos a los y las estudiantes a movilizarse
en la semana de lucha en el País Valenciano, que acabará con las movilizaciones del 23 de octubre.
Consellera dimisión, por unas condiciones dignas en las aulas!
Al País Valencià, Front d’Estudiants!
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